Voy a poner una recetilla dulce por si os apetece hacerla para desayunar este fin de semana. Es un bizcocho jugoso, jugoso, tierno, tierno y rico, rico. Se hace en un pis-pas porque va al microondas, y no os podéis imaginar lo esponjoso que queda. La cáscara de naranja le da un puntito muy especial, pero ¡ojo!, no va rallada, sino que se bate con el resto de ingredientes, y así queda en trocitos muy pequeños. El caramelo líquido lo puse porque, como el microondas no dora, así le daba otro colorcillo a la parte que queda dentro del molde, pero se puede quitar sin ningún problema. ¡Que os guste!
INGREDIENTES:
3 huevos XL.
1 vasito de vino tinto (100 ml).
100 ml. de aceite de oliva suave.
200 gr. de azúcar.
250 gr. de harina.
1 sobre de levadura.
Cáscara de una naranja pequeña, incluida la parte blanca.
Caramelo líquido.
PREPARACION:
Se baten los huevos con el vino, el aceite, el azúcar y la cáscara de naranja. Se incorpora un vaso de harina con la levadura, se bate; otro vaso de harina, se vuelve a batir y el último vaso de harina, y se termina de batir.
Se vierte en un molde de silicona pintado, ligeramente, con caramelo líquido. Se mete en el microondas durante 8 minutos, a potencia máxima. Los últimos 2 minutos se pone, además, el gratinador. Se deja reposar unos 5 minutos más dentro del microondas, y se saca para enfriar.